Recordatorios para Barrera.
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“ ¿Te impacientas? ¡De ningún modo serás un gran hombre!”
2
“Te has quedado inmóvil contemplando el camino... ¿Esperas acompañantes? ¿Esperas a los delincuentes? ¿O acaso temes? Cuida bien de llevar lo suficiente para el viaje: medios de transporte, alimentos y armas para defenderte; mas cuando hayas conseguido todo ello, entonces... ¡corre! El temor al viaje, cuando llevas lo necesario para llevarlo a buen término, es una debilidad”
3
“ Para viajar hacia un destino cualquiera es necesario saber adonde se va y como se llega. Hay destinos tan raros y selectos que son desconocidos aún, y no existe ni siquiera una brecha que nos conduzca hasta allá. ¿Que haces, pues, preguntándole al policía de caminos cómo se llega hasta allá? Para ser explorador hay que ser también, un constructor de caminos. ¡No son los mejores destinos los que cuentan con autopistas!”
4
“Es necesario prevenirnos contra el sesgo de la similitud supuesta. Para ser superior es preciso habituarnos a la soledad. Siempre se contempla mejor el amanecer después de una larga y solitaria caminata en medio de la noche”
5
“Amanecer luminoso; tarde sombría y nublada: tal ha sido el amor para mí. ¿Y el brillante y cálido mediodía? Vendrá después de una fría, larga y dolorosa medianoche. ¿Servirá de algo adelantar el reloj? Para soportar el amor, es preciso soportar primero la espera. Entretanto, ¡Consigue un buen abrigo!”
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“ El amor que no puede expresarse, se convierte en fuente de tragedias penosas y siniestras para el amante. Ya no soporto la mediocre suposición de que basta con que el amor exista. El verdadero amor es un arte ¿Quieres pues, ser artista? ¡Primero aprende a amarte!”
7
“ Para dominar una nueva habilidad, es útil consultar con los maestros en ella, aprender a usar las herramientas y no temer destruir el material y arruinarlo. Pero cuando ya se ha superado la etapa de aprendiz, todo uso inadecuado del material, es señal de torpeza. Mas si se quiere dominar una habilidad nueva, es necesario también inventarla”
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“ “¡Ya no me soporto!” Entonces suicídate”
9
“ ¿Existe un solo individuo en distintas etapas cronológicas, biológicas y socioculturales? ¿O existen diez, cien, mil individuos dentro de un mismo cuerpo? En este último caso, es preciso que de vez en cuando la realidad sirva de Hitler a la subjetividad. Todo lo que no sirve debe perecer, o su conservación nos llevará al desastre”
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“ Aprender a vivir sólo es el primer paso si se quiere vivir en comunidad. Lo otro, es simplemente el vulgar instinto de la borregada. Ningún borrego ama a la soledad. Y esta solo ama a los seres libres”
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“ Desligarse de lo que nos es precioso y mostrar una sonrisa... A veces, los diamantes se mezclan con vidrios... ¡dios es tan malo! Y no obstante, el diamante acaba por rayar al vidrio. Mas en estas circunstancias, el diamante ha cobrado apego por el vidrio, y el rayón del vidrio lastima la noble virtud del diamante, y se siente mal por ser tan duro. ¿Cómo puede conseguirse la felicidad para el diamante? Solo mediante el reconocimiento de la abismal diferencia entre uno y otros. Duro en verdad le será al diamante abandonar a los vidrios y encontrar a sus iguales. Pero en realidad... ¡Se vive tan bien entre perlas!”
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“ El niño depende y hereda el reino de los cielos; el hombre es libre y conquista el reino de la tierra. Demasiada puerilidad hay sobre este planeta, mas existen quienes no aprendieron jamás a ser pueriles. A ellos les es preciso convertirse en hombres y conquistar la tierra. A veces, la tragedia nos obliga a ser superiores... ¿a que vienen entonces todas esas quejas y lamentos? ¡Toda lamentación, si se tiene el espíritu, la dignidad y la superioridad del hombre libre, es también un reto!”
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“ Dios es el padre de toda felicidad, el hombre es culpable de toda infelicidad... ¿Es pues, el hombre libre, Dios?”
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“ Si se quiere llegar a ser verdaderamente superior y libre, conseguir todo aquello que deseamos para nuestro deleite, es necesario pensar por nosotros mismos y olvidarnos de las enseñanzas perniciosas, sobre todo las paternas. Toda moral es una fuente de infelicidad cuando se opone a nuestros deseos. Saber escoger nuestro destino es nuestra mayor fortaleza y nuestra peor debilidad; hay quienes aunque quieran escoger su destino, no pueden; otros escogen su destino de forma equivocada. ¡La libertad de acción no es para los antropomorfos! Toda inmoralidad en los antropomorfos, es un atajo a su propia destrucción; mas en los hombres libres, es un atajo hacia la superioridad. Si quieres seguir mi consejo... ¡Cuida que no seas ególatra!”
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“ hay que saber desear. Para ello es indispensable saber que se desea, como se llega a obtener lo deseado, y saber para que se desea. Y sobre todo, quien desea debe triunfar sobre los obstáculos que se oponen entre él y el objeto de su deseo. Al lado del camino que conduce hacia su meta hay siempre una salida de emergencia que reza: dios lo quiso así; o si no: No siempre se obtiene lo que se desea; otra de las clásicas: el tiempo lo dirá. Mas el hombre que de verdad lo es, contempla con indiferencia esas salidas: sabe que dios es mudo, que siempre hay un modo de llegar hasta su objeto y que al tiempo se le puede obligar a decir lo que uno quiera. Mas es preciso que el hombre libre posea, además de su objeto, una alegre predisposición a aceptar y a superar con éxito los retos que se le presenten”
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“ ¡Como! ¿Lo que me hacía temblar no hace una hora, ya no es sino un vulgar cadáver? Cuando se tiene miedo es necesario convertirse en asesino; Don Quijote, para vencer a los gigantes, primero debía despedazarlos. Nunca un problema es tan grande cuando se le divide en mil partes; y resolver mil pequeños problemas es un juego infantil. ¿Seré acaso, más débil que los niños?”
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“Toda habilidad que no se ejercita adecuadamente, termina por atrofiarse. Pero en el caso de la libertad y la voluntad, su atrofia pesa más y duele más que cualquier otra cosa. Hay quienes tienen la rara suerte de nacer para ser libres... ¡pero para ser libre de verdad, es preciso aprender a conquistar nuestra libertad! Muchos hombres libres han nacido en la cárcel vulgar de lo convencional. ¿Estas listo para la fuga?”
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“Individualidad y egoísmo no son iguales: aquella es el reconocimiento de nuestra unidad y unicidad en medio de un conjunto; el egoísmo no es otra cosa que la ceguera y la miopía propia de los seres incultos. Reconocer la existencia de los otros... ¿No es validar nuestra propia existencia? Cuando se pueda reconocer a nuestros iguales, sabremos comprenderles; más si se vive mucho tiempo contemplándose a uno mismo... ¡Se termina por suicidarse en la fuente!”
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“ Es necesario reconocer y alimentar lo malo que hay en nosotros si de verdad se quiere llegar a ser bueno. Siempre se reprimen demasiados deseos inmorales; ideas demasiado locas e ilógicas... Pero para ser feliz es necesario asumir la existencia y el derecho de existencia de estas inmoralidades, y de estas ilogicidades. Ellas son más valiosas que toda la moral y toda la sociedad... ¡Son parte de nosotros!”
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“Toda represión excesiva es fuente de una potencial neurosis... ¡Como! ¿El mundo es una fábrica de neuróticos, y la moral, su maquinaria?”
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“ El dominio de los demás es sólo un accesorio del dominio de sí mismo. Todo el que no sabe obedecerse y se encuentra en una posición de poder, degenera en tirano. ¡Ten cuidado, no vayas a convertirte en tu propio tirano caprichoso, pues ninguna revolución podrá liberarte!”
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“Aprender a confiar en uno mismo, a clavar la vista en el horizonte y a construir pacientemente, son las cualidades indispensables de todo hombre libre. Nuestra felicidad no está en lo próximo, sino en lo lejano; no en lo fácil, sino en lo difícil; no en mañana, sino en pasado mañana. ¡En dos horas se construye un castillo de naipes!”
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“Aprender a soñar, vivir con sueños y aprender a tener sueños es digno de un hombre libre; vivir de sueños es propio del antropomorfo. ¡Cuidado: el sueño más bello, si lleva mucho tiempo siendo solo quimera, se convierte en monstruosa pesadilla! Preciso es, aprender a realizar los sueños, o cuando menos... ¡matarlos a tiempo! Aunque no cualquier sueño es digno de volverse real”
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“Vale más un hombre libre y triste que un antropomorfo esclavizado y que niega su tristeza. La tristeza de aquel conserva aún la nobleza y lo sublime del sentimiento. Algún día encontrará el medio para salir de ahí. La negación del sufrimiento del antropomorfo me hiela la sangre: “Soy feliz a pesar de todo” dice. El peor enemigo del hombre que sufre es el predicador de la felicidad “por las cosas pequeñas, contra todo y pese a todo” Ahí donde está el sufrimiento, también se encuentra el medio para llegar al bálsamo. ¡Aléjate de mí, predicador infame! ¿Cómo podría ser feliz mientras tú estés aquí? ¡Mi felicidad está en mi meta!”
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“Para confiar en alguien externo es preciso confiar en uno mismo. Nunca nadie, por bien intencionado que sea, podrá darnos aquello que solo a nosotros nos corresponde crear. A veces el miedo, la inseguridad y el fantasma del pasado nos hacen malas pasadas. Para ser de verdad exitoso, es necesario desligar el presente del pasado. ¿Suena difícil? ¡Más difícil es vivir justificando la mediocridad!”
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“ He aquí un descubrimiento que me ha costado sangre: lo que parece un gran mal es, a la luz de un análisis cuidadoso, una bagatela; pero lo que parece una bagatela, en realidad es un error de consecuencias imprevistas y funestas. Saber observarse, saber analizar fríamente y calcular el alcance de nuestras acciones es imprescindible si no se quiere regarla”
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“ ¡Qué difícil es el oficio de aprendiz de albañil! Uno se lastima aquí, se corta acá, se golpea la cabeza. Pero construir es un aprendizaje necesario y hasta vital para el hombre superior. ¡Si de verdad se quiere ser un genio, no hay que temer parecer un imbécil! Pero tampoco hay que soportar la imbecilidad. El aprendiz necesita reflexionar acerca de lo que hace bien o mal; con el tiempo, será maestro. ¿y si esta primer casa no queda bien cimentada? Bueno, ¿que? ¡Aprenderé a construir torres!”
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“Los malos maestros no son una excusa suficiente para justificar la mediocridad. ¡A menos que seas un mal alumno!”
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“ No merezco la compasión ajena, pero menos aún mi propia compasión; la primera humilla, la segunda... ¡Paraliza!”
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“ He aquí una larga colección de errores. En ella se encuentra mi estupidez a flor de piel. Demasiado poco aprendí en mis primeros años, y lo que aprendí, era demasiado malo: fui alimentado con cicuta. Mas ahora que puedo alimentarme sólo y he probado la ambrosía... ¡Que se mueran de hambre los ángeles!”
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“ Quien no sabe aguantar y afrontar el sufrimiento... ¿cómo aspira entonces a soportar la felicidad? Pues un corazón amplio soporta las pasiones y los sentimientos intensos, sean de la naturaleza que sean. Aún así, la profundidad del dolor es superficie comparada con la profundidad de la dicha. ¡He aquí una alegre esperanza!”
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“ Tenemos el derecho a abandonar nuestra meta si esa fuera nuestra voluntad... ¡Pero guárdate de calumniarla! Sobre todo si eres incapaz de obtenerla. No hay nada peor que el tipo de gente que usa las palabras vicio, malo, pecado, error como si fuesen sinónimos de imposible para mí”
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“ Me he equivocado y reconozco mis errores. ¡Soy demasiado superior para ello! Solo quienes son débiles o inferiores tienen necesidad de ocultar sus errores y resaltar sus virtudes... ¡Les es necesario engañar!”
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“Hay que tener cuidado para advertir la degeneración de la superioridad, si se quiere ser libre. Cuando Soy superior sirva más como justificación para no hacer las cosas que como acicate para obtenerlas, entonces pregúntate: ¿No será acaso que mi Soy superior es sinónimo de no puedo hacerlo? En verdad que Soy Superior es una frase de lucha, y no de retirada”
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“Observa un teatro de títeres, una función de magia, un programa de televisión: la apariencia no es de ninguna manera la realidad. A su vez, la apariencia de un fenómeno o hecho a menudo difiere de su esencia real; de suerte que o te vuelves un intérprete de lo real y lo fantástico o... ¡Te confundes y te engañan!”
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“Ya me es penoso transitar por esta senda y por ahora ya no deseo continuar hacia este objeto en particular. He aquí la frase del hombre libre para reconocer su fracaso con dignidad. Incluso ahí ha ejercido su libertad, y ha dejado abierta la posibilidad de retornar otra vez hacia el mismo objeto, cuando sus posibilidades sean mayores. Toda otra forma de hablar calumnia, no ya al objeto de nuestro deseo, sino a nosotros mismos”
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“El fracaso es la antesala del éxito. Aprovecha la espera en convertirte en alguien importante... ¡Nadie que sea superior hace antesala! Sobre todo... ¿vale la pena hacer antesala? Odio esperar demasiado para obtener una insignificancia. Definitivamente, la antesala es la excepción, nuestra excepción... ¡De ningún modo debe ser nuestra regla! Mas si hay que esperar, ¡Que al menos valga la espera!”
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“ Nunca despreciar nuestra meta y nunca sobrevaluarla. Nuestra meta debe estar a nuestro nivel, o más arriba si es que se trata de subir un escalón; ¡pero nunca abajo de nosotros! Por otra parte, el objeto es inferior al sujeto; de suerte que cuando nos planteemos una meta, que nuestra superioridad esté en juego, pero de ningún modo nuestra libertad, y menos aún nuestro orgullo. Que podamos, en circunstancias extraordinarias, raras e inusuales, posponerla o cancelarla sin que por ello peligre nuestra dignidad o nuestro amor propio. Sin embargo, la cancelación sigue siendo nuestra excepción”
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“ En tiempo de paz, cualquiera es buen soldado... ¡Cómo hacen falta hombres en épocas de guerra!”
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“ Aprovecha la paz corta para entrenarte bien para la próxima guerra, sobre todo si es una guerra contra una potencia desconocida. Y si acaso es que te han derrotado antes, entonces... ¡Prepárate a tu vez para tu victoria! Hay quienes aconsejan luchar en tu propio campo... ¡Yo aconsejo que hay que ser un combatiente de todo terreno! Pero es preciso extremar el entrenamiento a fin de vencer. ¡Vae Victis!”
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“ “Pero qué es el hombre para quejarse de sí? Quiero y te lo prometo, amigo mío, enmendar mi falta; no volveré, como hasta ahora, a exprimir las heces de las amarguras del destino; voy a gozar de lo actual y lo pasado como si no existiera. En verdad tienes mucha razón, querido amigo; los hombres sentirían menos sus trastornos (Dios sabrá por qué lo hizo así) de no ocupar su imaginación con tanta frecuencia y con tal esmero en recordar los males pasados, en vez de en hacer soportable lo presente” Cita de Werther, de Goethe.”
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¿Apenas llegas? No es posible, me quedé dormido al inicio de la carrera, y aún he corrido a velocidad moderada... ¡Te creíste la moraleja de la tortuga!
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“Si te quejas de que todo te sale mal y siempre fracasan tus proyectos, te aconsejo que de hoy en adelante... ¡Planees tus fracasos! Sería muy mala suerte en verdad que ahora sí tuvieras éxito”
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Cuando un soldado le echa la culpa de su derrota a un arma inservible, la primer vez pienso que es un hombre que se avergüenza de la derrota, y lo estimo por ello; más la tercera vez que lo dice, pienso que es un imbécil. ¡El hombre es la cosa más perversa del mundo; hay miles de armas disponibles! ¿Por qué aferrarte a un arma que no sirve?
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No es lo mismo un vagabundo que recorre Europa y un vagabundo que da vueltas en círculos en una misma ciudad; ¡Y peor si es una ciudad gringa! Aunque vagos, el primero es indudablemente superior. ¡Hasta algunos vagabundos son más exigentes que ustedes, lectores de best sellers!
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“la felicidad es aprender a dar sin esperar recompensa. ¡Avísenme cuando Carlos Slim esté en la depre!
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“En tiempo de paz, cualquiera es buen soldado; en épocas de guerra... ¡Son grandes atletas!”
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“Se sobrevalora demasiado el esfuerzo de la tortuga solo por un descuido de la liebre. La tortuga sigue siendo la tortuga y la liebre puede derrotarla tantas veces como le venga en gana. ¡una gaviota no hace verano! Más astuto me parece el cangrejo que venció a la zorra colgándose de la cola de esta; mientras no le descubran el enigma, la seguirá venciendo cuantas veces le venga en gana. Es pues, este el mundo apto para los fuertes, o cuando menos, para los parásitos... ¡No hay lugar para las laboriosas tortugas!”
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“Lo que tan sabiamente condenó la Madre naturaleza, ha sido redimido por el hombre hasta el punto de que la tierra es cada vez menos un sitio rebosante de vida sana, y cada vez más un museo global en donde -¡aún!- habita el homo sapiens”
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“La pena, la tristeza y el fracaso ponen a prueba nuestra valentía y nuestro orgullo; la alegría y el éxito prueban nuestra grandeza y superioridad... ¿Cuántos son los que se han quedado a la mitad de su potencial solo porque ahí encontraron su comodidad? Se disfruta mejor el éxito después del fracaso; pero toda comodidad... ¡Es un fracaso a medias!”
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“La mejor venganza que puedes cobrar de un saboteador, es llegar a la meta a pesar de sus esfuerzos. Mas no por ello le perdonarás la patada a la que se ha hecho acreedor, siquiera para que no vuelva a intentar sabotearte de nuevo. ¡Los perros aprenden por conductismo!”
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“Si un saboteador se esmera con tal habilidad que te quita toda posibilidad de éxito en tu proyecto, entonces debes plantearte como nuevo objetivo conseguir para ti aquello que le es vital y preciado; ¡Y si después se lo das a los perros, mejor! Te aseguro que nunca más volverá a sabotearte, pero te reirás de él toda su vida”
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“El perdón solo se volvió popular cuando el hombre se domesticó y perdió la capacidad y la grandeza necesarias para vengarse de las afrentas. Siempre el débil es quien está más presto a perdonar. Mas entre los hombres con la capacidad para cobrar venganza, el perdón es una forma de desprecio”
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“Te perdono. Dicho por el hombre débil, significa te perdono; dicho por un hombre libre, significa No tengo tiempo para nimiedades”
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Un insulto que no ofenderá al destinatario porque no lo entenderá jamás: Los romanos tenían espectáculos en el circo, en donde los bárbaros, los esclavos y las bestias se enfrascaban en combates mortales, para diversión de la chusma y el pueblo bajo. Nuestra civilización tiene ñeretón: las formas cambian; los participantes, son los mismos... ¡Eso es progreso!
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Eros se ha quedado lejos de la humanidad. Ya ni siquiera Tanatos los quiere. Por fortuna, Zeus no es ecologista.
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Si te sientes solo, deprimido y que te está cargando la chingada, no te preocupes; no estás solo... ¡Ya somos dos! Hay cosas que es necesario gritar para sobrevivir en este mundo de enajenados y cosas sin sentido. En fin; la depresión es síntoma de inteligencia.
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Aprender del error. Un lugar común que necesita aclaraciones. La única enseñanza que se puede extraer de los errores es la conclusión de que estamos equivocados y que por tanto es necesario rediseñar nuestras creencias, ideas y opiniones respecto a ellas.
Vayamos un poco más meticulosamente: el error necesita al menos estos factores para darse: un objetivo o meta, una serie de creencias, ideas, actitudes, conocimientos y saberes que nos permitan acceder a una explicación, interpretación o predicción de este objetivo, así como una serie de medios apropiados para tal fin, y elegidos en base a nuestros conocimientos, reales o supuestos. Estas construcciones pueden ser empíricas o científicas. Y como cuarto punto, que este sistema de explicación, interpretación y predicción, y los medios elegidos en base al sistema, no sea efectivo para lograr nuestro objetivo o nuestra meta. Al darse el error, es necesario verificar nuestro esquema de interpretación, reestructurarlo y añadirle más elementos de análisis para de esta manera abordar nuestra meta de una manera más eficaz. No es pues, como de una lecturita rápida de la frase “de los errores se aprende”, que debamos obstinarnos en el error, o que premeditadamente nos pongamos en situaciones impredecibles para obtener un conocimiento válido. El error es solo una señal que debería impulsarnos a continuar buscando nuevas herramientas. Con todo, el error es indeseable y poco constructivo, pues su corrección implica mayores costos en tiempo, esfuerzo y dedicación.
El error debe ser, entonces, un evento fortuito, inesperado e indeseable que ocurre cuando nuestro objetivo o meta no puede ser obtenido usando nuestros esquemas de explicación, interpretación o predicción previos. Sería como si desde la Ciudad de México saliéramos hacia Veracruz tomando la autopista México – Querétaro, creyendo realmente que esa es la México-Veracruz. Una forma de corregir el error sería buscar mayores elementos de análisis: un mapa nos podría ubicar mejor, solicitar información o la simple observación de un “Querétaro 200 km” nos daría una señal de alarma, puesto que esta ciudad queda al norte, y Veracruz al sur. Sin embargo, el error por sí solo no ha aportado mayores conocimientos, ni ha hecho más preciso nuestro conocimiento de las carreteras del país. Con solo el error, podría llegar seguramente hasta Querétaro, y si ninguna señal se opone, continuaría hasta llegar a la frontera con gringolandia. La obstinación en el error es señal de necedad: nadie anda tomando la primer autopista que encuentra, imaginando que todos los caminos llevan a un destino único, y que ese destino es curiosamente, también el que ellos desean. Por supuesto, en cuestiones de trascendencia vital, existe esa idea... ¿El destino final de cada individuo es menos importante que el simple destino geográfico?
Curiosamente, solo deberían permitirse aprender del error todos aquellos que tienen sobre sí la pesada capacidad para corregirlos. Pues una acumulación excesiva de errores no resueltos tendería a volver inoperante todas nuestras herramientas, e inevitablemente nos conduciría al fracaso. Por otro lado, la revisión de todas nuestras ideas nos haría descubrir que hay errores validados por más errores que a su vez están sustentados en otros errores. Corregir el error necesitaría reestructurar todo el sistema... ¿Y quien sería capaz de reconstruirse a sí mismo? Solo quienes son superiores. El error de hace veinte años empieza a dar sus primeros frutos... Pero como ya lo he olvidado, arranco de raíz al pequeño error de ayer. Tras el fracaso... ¡Al menos me queda un chivo expiatorio! Y aún hay quienes abandonan su meta y ocultan su error.
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Nunca olvides a los ausentes cuando estés en un grupo. Aunque los desprecies, serán tus más grandes aliados para mantener tu individualidad. La opinión de un grupo no tiene porque influir en ti.
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La vida, o es arte o es mecánica. Ser artista es más difícil que simplemente cumplir con el ritual cotidiano. La vida como arte es un error del mecanismo, una tuerca rota o una batería baja o alta. Y sin embargo: solo el artista puede aspirar a la grandeza. El artista l
viernes, 4 de abril de 2008
algunos aforismos personales
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